HARINA DEL MISMO SACO

Desde el Banco Central sigue sonando el falso sonsonete del llamado crecimiento económico del gobierno de Leonel Fernández

Al iniciarse el nuevo año, el llamado Gobernador del Banco Central no perdió tiempo y soltó un follón en su primer informe de los últimos cinco meses, tan o más descompuesto que aquéllos a que el pueblo ya estaba acostumbrado con el gobierno pálido de Leonel Fernández. ¡Crecimiento, crecimiento económico y el pueblo cada vez más pobre y aumentando su miseria!

Ahora es con Hipólito Mejía-PRD que el flamante Guerrero Prats, tan de pura cepa trujillista como los más connotados funcionarios del pasado gobierno, ofrece un informe donde dice, sin apretársele el pecho, de un crecimiento económico de un 12.5%, cuando la parálisis económica y la miseria de la gente hace historia y siembra el pánico por la incertidumbre y el deterioro ultrarápido del nivel y calidad de vida de cada familia dominicana.

En realidad, la vagabundería de Valdez Albizu, como sirviente y mercenario de Leonel Fernández, parecían que nunca serían superadas, pero este follón de Guerrero Prats mueve a pensar lo peor, y con facilidad se puede arribar a la conclusión de que lo de Valdez Albizu será cosa de muchacho ante lo que pinta en perspectiva Guerrero Pou, perdón, Guerrero Prats.

Sería el Presidente de la Asociación de Industriales del Cibao, el nombrado Julio Hernández, quien le habría enmendado la plana, desde el área misma del campo de los explotadores criollos, al flamante economista de la Gobernación del Banco Central, que como tal economista sólo puede saber de apologética, o sea, defensa y justificación a ultranza y a despecho de la realidad capitalista de la catástrofe económica que viene acarreando la administración perredé-Mejía con el ahondamiento de las ya hartamente conocidas recetas neoliberales a ultranza.

Competencia en condiciones de desigualdad absoluta entre monopolios extranjeros y productores nativos, dando pie al tristemente dumping; subvaluación de mercancías importadas con apoyo gubernamental a sus clientes políticos; drástica disminución del poder adquisitivo, así como de pago de las deudas contraídas por parte del público consumidor; alza descomunal de los impuestos con el "paquetazo", así como de los precios, etc., etc., son de las ráfagas con que, desde el mismo campo de la burguesía "criolla" se le riposta al Banco Central, que más que una institución al servicio de la nación se muestra a cada instante sólo como un ciego y burdo instrumento para justificar cada nuevo nudo que le imponen los monopolios imperialistas al cuello de la economía dominicana.

Desde el campo del pueblo trabajador, eso del gran crecimiento económico de un 5%, de un 6% anual, o de un 12.5% semestral, es una cruel y sádica burla que hacen al son de la propaganda de la prensa de los verdugos del pueblo, al hambre, a la pobreza y a la miseria de éste que, a cada paso, adquiere una dimensión mucho más dramática puesto que, en concreto, se traduce en imposibilidad real de comer, vestir, comprar medicina, enviar los hijos a la escuela y garantizar hasta un pedazo de jabón de cuaba con que higienizarse el cuerpo; amen de no poder pagar agua, luz y alquiler de un rancho.